Patrimonio Industrial y Minero

El Puente de Hierro

Este puente se empezó a construir sobre 1915 y no se llegaría a terminar hasta 1924. Esta obra destaca por su original ingeniería industrial. Está situado al este de Cantoria, en la vía que conduce a otros núcleos de población del valle y a la capital de provincia por el Cerro de la Virgen.

La parte del puente realizada en hierro tiene estructura de forma cicloidal. Esta curva se une a su base con contrafuegos del mismo material. Comienza y termina con dos miradores de base cuadrada a cada lado, desde los cuales se contempla la vega de los pagos de Tomácar, Ramúl, Oraibique y Laolí. 

Es un ejemplar de grán interés en la provincia, del que sólo había otra estuctura de hierro similar, que es el de Santa Bárbara en Overa, de características similares.

Fue Construido por la fábrica de construcciones metálicas La Constancia de Linares, empresa fundada en 1870 propiciada en gran medida por el auge industrial de la zona debido a la generalización de la tecnología del vapor en la minería del plomo. Las obras de mayor importancia en las que participó la fábrica de Linares fueron: el hotel de la Alhambra (Granada), los puertos de Almería y Huelva, la fábrica de Artillería de Sevilla, el teatro de Ronda y el puente de hierro de Santa Bárbara (Huércal Overa).

Por falta de pago, esta empresa retuvo el puente hasta bien entrado los años 20, en que empezó a montarse, tal y como nos muestras las imágenes anexas, inagurándose en 1924. No llegó a un més cuando se produce una gran riada en la que las aguas llegaron a saltar por encima. Esto fue una prueba de fuego de la solidez de la estructura. En las inundaciones de 1973 llegó la segunda gran prueba, ya que también el agua sobrepasó la base el puente, a la altura de las barandillas, sin inmutarse.

Durante la construcción de sus cimientos, dieron con una bolsa de agua subterránea. Varios operarios tuvieron que achicar toda el agua metiéndose hasta la cintura. Pocos días después, fallecieron de pulmonía. 

 Dos imágenes del mismo día del montaje de la estructura de hierro del puente. En la imagen el ingeniero en jefe y demás trabajadores. Colección: Miguel Aránega

Noticias de Prensa sobre la Construcción del Puente

Contratista estafador

Dos noticias sobre el mismo hecho, en el que el contratista del puente paga con dinero falso a uno de los trabajdores, además de estafale 92 pesetas, ya que le adeudaba 8 y le pagó con un billete falso de 100.

1925. Las obras del puente se encuentran en avanzado estado de construcción

Vino Alfonso XIII a Almería donde le esperaban grandes fastos y recorridos béllamente decorados, intentando enmascarar una triste realidad. Pero el destino quiso que Su Graciosa Magestad se saltase el protocolo, recorriendo algunos tramos de caminos y carreteras que no estaban en el intinerario inicial.

Llegó terriblemente costernado de la situación que vio, mas propia del medievo que del siglo XX y prometió mejoras inminentes para Almería. En 1925 empiezan a materializarse estas promesas con la construcción de la carretera de Almería a Puerto Lumbreras, la de Tabernas a la Venta de la Media Legua pasando por Gérgal, la de la Venta de los Yesos a Uleila - Albanchez y desembocando en Cantoria, donde en octubre de ese año estaba todavía en contrucción el magnífico Puente de Hierro, aunque las obras estaban ya muy avanzadas. 

Crónica Meridional. 4 de octubre de 1925

Después de la Riada del 73

Tres eran los puentes de hierro que cruzaban el rio Almanzora desde su nacimiento en Alcóntar hasta su desembocadura en Villaricos. De los tres sólo queda uno, el más pequeño, el puente de hierro de Cantoria. El primero y más grande era el de Cuevas del Almanzora, que se inauguró en abril de 1912 y en diciembre de 1966 el arco metálico central cedió debido al peso de un camión cargado de marmolina.

El segundo en importancia fue el de Santa Bárbara, construido el primero de todos, en el año 1898 y que estuvo en funcionamiento hasta que la riada de 1973 lo arrastró enterrándolo unos metros más abajo.

El tercero fue el de Cantoria, que se terminó de construir en 1924 y en la riada de 1973 aguantó sin inmutarse las embestidas del río que saltó por encima. El diario La Línea de Murcia del 14 de noviembre de ese año hace un llamamiento a las autoridades de la necesidad de crear una serie pantanos, presas y represas para contener las aguas de las crecidas y evitar las inundaciones con la desolación y ruina que dejan a su paso. Ver inundaciones de 1973

Antiguo puente de hierro de Cuevas, el de Cantoria (el único en activo) y el de Overa.

Desde su inauguración, la zona del Puente se convirtió en el lugar predilecto para pasar el día de las meriendas. Colección: Macías Sánchez

Un grupo de amigos en el día de las meriendas en el río Almanzora a su paso por el puente. Colección: Diego Piñero

Familia de Pedro García, dueños del molino el Puente Hierro que sucumbió a las aguas de la inundación de 1973. Colección: Familia García Carrillo

Mari Caty y Pedro García, nietos de Pedro García, dueño del molino del Puente Hierro. Colección: Familia García Carrillo

Imagen tomada en 2013. Colección: Decarrillo

Imagen tomada en 2014. Colección: Decarrillo

Imagen nocturna tomada en 2017, al poco de pintarse el puente de rojo. Colección: Decarrillo

Imagen tomada en mayo de 2022, después de las intensas lluvias de la primavera. Colección: Decarrillo

Registro de la mina Mi Fortuna. Documentación: Miguel Ángel Alonso

Las Minas de la Cerrá en la desembocadura del Arroyo Albanchez

A pocos metros de la desembocadura del Arroyo Albanchez al río Almanzora, se encuentran los vestigios del principal foco minero del municipio de Cantoria. Unas minas en las que se extraía hierro principalmente en las que se intentó emular el sueño minero que estaban viviendo otras poblaciones cercanas. Cosa que no llegó a suceder.

En la Jefatura de Minas hay registradas en Almanzora unas 40, de las cuales sólo 2 llegaron a explotarse, la de la Cerrá llamada Mi Fortuna, que inicia su explotación en 1896 y la de la Cuesta de la Herradura, llamada San Andrés, que inicia su explotación en 1884 y cierra en 1895. Ambas están situadas en la desembocadura del Arroyo Albanchez.

Actualmente por los cerros alrededor de Almanzora, de la rambla la Jata, del Cerro de la Mezquita, el Risco y rambla de Torrobra hay gran cantidad de “catas” del terreno, para saber si merecía la pena su explotación o no.

Seguramente la profesión minera del I marqués de Almanzora unida a la fiebre minera que se desató en la provincia desde mediados del siglo XIX y que fue la gran protagonista de la economía de Almería durante casi un siglo, con Cuevas del Almanzora, Serón, Bédar y la sierra de Gádor como principales focos, animó para poner en producción estas industrias extractivas.

Después de la guerra civil y el cierre de fronteras con la consiguiente escasez de ciertos minerales, se decidió reabrirlas, estando en producción desde 1953 a 1957 a través de la sociedad Minascofe S.L. y con el nuevo nombre de Mina Numancia. Nunca fueron rentables, por eso se abandonaron a los pocos años.

Todavía queda recuerdo lejano en la mente de los mayores del lugar las sirenas que sonaban cuando se iban a tirar barrenos o cuando finalizaba el trabajo. A la media hora más o menos llegaban a Almanzora andando los trabajadores que finalizaban su jornada, completamente llenos de polvo rojo del mineral de hierro, y sólo les blanqueaba lo que las gafas les había protegido.

También cuentan que cuando los niños les llevaban el desayuno a sus padres, al esperar en la entrada a la mina a que salieran, ni tan siquiera los conocía porque iban todos llenos de polvo y con unas gafas para protegerse los ojos.

Mas información...

Minas de la Cerrá

Ruinas de la Antigua Fábrica de Mármol

La explotación de las canteras de mármol en Macael data de la época de los fenicios, quienes utilizaron esta piedra para construir sarcófagos, tal y como se ha podido comprobar posteriormente al encontrar tumbas elaboradas con mármol blanco de Macael. La llegada del imperio romano a la península Ibérica motivó que el mármol blanco también fuera utilizado como elemento constructivo en obras tan emblemáticas como el Teatro Romano de Mérida y la ciudad de Itálica en Sevilla.

Durante la época musulmana las canteras de Macael adquirieron gran fama y se extrajo mármol para diferentes obras, tales como la Alcazaba de Almería, el Patio de los Leones de la Alhambra de Granada, los jardines del Generalife y el Palacio de Medina Azahara en Córdoba. Después de la Reconquista, las extracciones de mármol y, por consiguiente, su industria entran en un declive hasta mediados del siglo XIX, en el que empiezan a explotarse cotos mineros como el de las sierras de Cuevas, Bédar, Serón, que atrajo a una clase acomodada que consumió ingentes cantidades de este material en la construcción de sus casas y palacetes.

En Cantoria disponemos de los restos de un aserradero y fábrica situada en el pago de Capanas junto al río. Esta industria fue construida por el industrial Joaquín Moreno para exportar el mármol transformado a Sevilla, donde tenía otros negocios relacionados con el sector. Además, fue el que se construyó el Cortijo de la Mezquita o Cortijo Grande, en la zona del Puente de Hierro. Esta industria utilizaba como fuerza motriz las aguas de la acequia del Prao, que se comunica con la de la Oli. Hoy día se conservan escasos restos de esta industria que padeció las inundaciones de finales de siglo XIX.

Ruinas del antiguo aserradero y fábrica de mármol de Capanas, que utilizaba como fuerza motriz el agua de la acequia del Prao. Colección: Decarrillo

Restos de material en la antigua fábrica. Colección: Decarrillo

Vistas desde el mirador de la fábrica. Colección: Decarrillo