Iglesia de los Pardos
Muy poca documentación nos ha llegado sobre la iglesia de San Miguel y San Francisco de los Pardos, en el Arroyo Aceituno. Sabemos que se construyó a finales del siglo XVIII en el estilo Barroco Tardío, sin torre adosada, pero sí con un campanario encima de la fachada principal. Es de una sólo nave rectangular con el techo raso de madera y yeso. Cuenta el altar mayor con un retablo de madera con tres hornacinas. Su rica imaginería sobrevivió a la guerra civil gracias a la protección de los vecinos.
Si sabemos a ciencia cierta es que se constituyó como parroquia propia en 1900, con párroco propio en la que dependían las ermitas e iglesias del Arroyo Aceituno como la de los Molinas.
De este templo de una sola nave destacan sus imágenes que datan del siglo XVIII y sobrevivieron a la guerra civil porque los vecinos lo escondieron en sus casas. Colección: Decarrillo
Iglesia está dedicada a la advocación de San Miguel y San Francisco. Colección: Decarrillo
Panorámica desde el Coro donde se aprecia es esmerado estado en el que se encuentra gracias a la labor de sus vecinos. Colección: Decarrillo
Imagen del padre Jesús para la procesión infantil de Semana Santa en la iglesia de los Pardos. Colección: Decarrillo
Postal de San Miguel que se destruyó en la guerra civil. Colección: Antonio García
Imagen actual de San Miguel. Colección: Decarrillo
Imagen actual de San Francisco. Colección: Decarrillo
Imagen del Padre Jesús. Cuando se restauró se utilizó pelo natural de una vecina. Colección: Decarrillo
Cuadro de San Miguel regalado por la Marquesa de Almanzora a finales del siglo XIX. Colección: Decarrillo
Imagen articulada del cruzificado que también se utilizaba en el sepulcro. Colección: Decarrillo
Antiguo sepulcro que se utilizaba en las procesiones del Viernes Santo. Colección: Decarrillo
Estandarte de la Virgen de la Asunción que se procesionaba en las festividades de San Miguel y San Francisco. Colección: Decarrillo